La hipertensión es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. También conocida como presión arterial alta, esta condición se caracteriza por niveles elevados de presión en las arterias, lo que puede tener graves consecuencias para la salud. En este artículo, responderemos a diversas preguntas frecuentes relacionadas con la presión arterial y la hipertensión.
¿Qué es la hipertensión?
Se habla de hipertensión cuando se detectan cifras de presión arterial por encima de un valor que, por consenso, se ha fijado en 140 mm Hg para la sistólica y en 90 mm Hg para la diastólica.
La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias cuando circula por ella. Hace falta una determinada presión para que dicha circulación se produzca, como las arterias son elásticas pueden adaptarse a diferentes situaciones. La presión cambia en diferentes lugares y por diferentes circunstancias.
Unas cifras altas aisladas no significan nada. Una elevación permanente de la presión arterial traduce una situación anómala de las arterias y señala al sujeto como un candidato a padecer problemas cardíacos (infarto, angina o insuficiencia cardíaca), renales (insuficiencia renal) y cerebrales (hemorragia o infarto cerebral y a la larga demencia).
La hipertensión es la señal de alerta en cuanto a un mayor "riesgo cardiovascular" y por eso, aunque la persona se encuentre perfectamente, deben tomarse medidas para su control.
Prevención primaria
La hipertensión arterial puede ser prevenida mediante una combinación de cambios de estilo de vida:
- Evitar el sobrepeso
- Aumentar la actividad física
- Reducir la ingesta de sal y alcohol.
Recomendaciones
Se recomienda tomar la presión arterial al menos 1 vez hasta los 14 años de edad, cada 4 – 5 años desde los 14 hasta los 40 años de edad, y cada 2 años a partir de los 40 años de edad sin límite superior.
Si la detección se hace en su centro de salud, y la primera toma es mayor de 140/90, antes de diagnosticarlo de hipertensión, le repetirán las mediciones al menos en 3 ocasiones.
Si la detección se hace en otro lugar, como por ejemplo en su farmacia, es importante que la medición se realice siguiendo las normas establecidas:
- Que esté en reposo, al menos cinco minutos antes de la medición, evite el consumo de café, tabaco o alcohol, 30 minutos antes de la toma, que no realice la medición después de practicar ejercicio o de comer
- Debe estar sentado en una postura cómoda, que no le apriete la ropa, que el brazo esté relajado y apoyado en una mesa, que no hable ni se mueva mientras le toman la tensión arterial.
¿Qué significa 140 mm Hg? ¿No es 14?
Para medir la presión arterial se utilizan los "esfigmomanómetros" o " tensiómetros". Son aparatos que se diseñaron a partir de columnas de mercurio que se desplazan sobre una banda milimetrada. De ahí que hablemos de 140 mm Hg o 140 milímetros de mercurio. La voz popular ha recogido desde hace tiempo los dos primeros dígitos y por eso se acorta a "14". Pero eso no es correcto porque obviamente no es igual 140 que 149.
¿Es correcto hablar de tensión arterial descompensada?
No, el término descompensada es una voz popular que alude a valores de presión arterial muy próximos. No se corresponde con ningún concepto científico. Los puntos diagnósticos de la hipertensión están comprendidos entre los límites de 140 y/o 90 mm Hg para la sistólica/diastólica, sea cual sea la diferencia entre ellas.
¿Aumenta la frecuencia de hipertensos con la edad?
Efectivamente, la presión arterial suele aumentar con la edad, es decir, es mucho más frecuente en las personas mayores. Se estima que hasta un 60% de las personas de más de 60 años en los países industrializados tiene la presión elevada. Esto no significa que sea normal a partir de cierta edad, sino más bien todo lo contrario, es decir, que siempre hay que controlarla.
¿Es el sobrepeso causa de hipertensión?
En la gran mayoría de los casos, el nivel de presión arterial e incluso la hipertensión arterial es el resultado del estilo de vida de una persona. La relación que existe y entre sobrepeso e Hipertensión, se conoce desde hace muchos años, y la reducción del sobrepeso es uno de los primeros tratamientos de la hipertensión, indicados en pacientes con un peso elevado.
Algunas veces, simplemente con esto ya se controlan correctamente. Entre los obesos, la frecuencia de hipertensión arterial, a cualquier edad que se considere, es entre dos y tres veces superior a la de los individuos de la misma edad que están en su peso ideal.
Me han tomado la tensión varias veces y cada vez es diferente, ¿eso qué significa?
La presión arterial cambia continuamente, no es constante, para adaptarse a las necesidades del organismo en cada momento. Tomas repetidas ofrecen cifras distintas, más llamativas en unas personas que en otras, en función de la diferente reactividad de cada uno.
La toma de la presión produce una reacción de alerta que tiende a elevarla, a medida que se repiten las tomas, las cifras obtenidas se aproximan entre sí, por eso no está de más que se tomen dos o tres veces y se considere la última o la media de todas como presión arterial. Se aconseja que antes de tomar la presión se repose al menos durante media hora.
¿Si soy hipertenso tengo que tomar medicamentos?
No necesariamente hay que tomar medicamentos siempre. En ocasiones, y dependiendo de las cifras de presión, del tipo de vida, consumo de alcohol, consumo de sal y grado de actividad, puede iniciarse el tratamiento con medidas no farmacológicas y observar si la presión se reduce en un tiempo prudencial. Si no se normaliza, lo más recomendable es iniciar un tratamiento con medicamentos, sin olvidar que la dieta, el ejercicio, y los demás hábitos de vida saludable no se deben dejar, aun cuando se tomen pastillas para la tensión.
Los medicamentos son menos peligrosos que la enfermedad. Es verdad que no existe tratamiento exento de algún efecto secundario, pero los antihipertensivos tienen pocos y, por el contrario, los perjuicios de una tensión muy alta son importantes.
Desde que me trato, me encuentro cansado, ¿es normal?
Si al principio del tratamiento sobrevino el cansancio, no tiene nada de anormal porque hay que dejar tiempo al organismo para adaptarse a una tensión más baja. Durante este tiempo usted puede notar síntomas de cansancio y ligeros mareos al cambiar de posición, que son pasajeros y no deben hacer que abandone la medicación.
Estos síntomas desaparecerán pronto y se encontrará mejor que antes. Si usted lleva tiempo con el tratamiento y le aparecen síntomas de cansancio, consulte con su médico.
Tengo tratamiento médico y aun así mi tensión aumenta, ¿es normal?
Si usted está al principio del tratamiento, eso no tiene nada de extraordinario, hay que saber esperar a que los medicamentos actúen. Los efectos de los medicamentos hipotensores no son inmediatos. Si la tensión arterial no se normaliza a la primera, su médico modificará las dosis o los medicamentos hasta conseguir el control adecuado.
En medicina, a menudo, se habla de curación cuando es suprimida la causa de la enfermedad. Como en la mayoría de los casos no se encuentra la causa de la hipertensión, no se puede, estrictamente hablando, utilizar el término de curación. Solo se puede hablar de "normalización" de las cifras de tensión cuando, gracias al tratamiento, vuelven a ser inferiores a 140/90 mm Hg.
Ahora bien, se puede hablar de curación cuando se conoce la causa concreta: por ejemplo, una malformación que se puede operar, pero esto es muy infrecuente.
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Autor(es): Luis Maita, Obra: Hipertensión, Publicación: , Última actualización: , Lugar de publicación: Madrid, URL: https://www.discapnet.es/salud/enfermedades/enfermedades-cardiovasculares/hipertension
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