Casi todas las personas han tenido un dolor de cabeza alguna vez. El dolor de cabeza es la forma más común de dolor, y una de las razones principales por las que las personas se toman días de trabajo o de escuela y acuden al médico.
Aquí tenemos un listado de las preguntas más habituales que se plantean quienes sufren dolores de cabeza. Se acompañan de una breve explicación para tranquilizar tanto a las personas que sufren estos ataques de dolor como a los parientes que se encargan de su cuidado.
¿Por qué duele la cabeza?
Para que exista dolor se deben estimular unos receptores especializados en recoger dicho dolor. En el cráneo, no todas las estructuras tienen receptores para el dolor y el cerebro propiamente dicho no tiene nervios que recojan la sensibilidad dolorosa.
Estructuras craneales sensibles al dolor
- Piel, músculos, arterias y hueso.
- Ojos, oídos, cavidad nasal y senos.
- Venas intracraneales.
- Meninges y arterias intracraneales.
Los nervios que recogen la sensibilidad de estas estructuras son el nervio trigémino y las primeras raíces cervicales, que transmiten los estímulos dolorosos a centros superiores, donde se integra toda la información.
Por tanto, el dolor de cabeza se produce si se dilatan, inflaman o traccionan las arterias, las venas, los nervios craneales sensitivos, si se producen contracturas de los músculos craneales o cervicales o si se inflaman las meninges.
En cada tipo de cefalea están implicados diferentes mecanismos. Fundamentalmente, se consideran las cefaleas vasculares (producidas básicamente por dilatación de las arterias), de las que los mejores ejemplos son la migraña, y las cefaleas musculares (producidas por contracción muscular mantenida), de las que el mejor ejemplo son las cefaleas tensionales.
Preguntas habituales sobre los dolores de cabeza
¿Es la cefalea un síntoma grave de que algo ocurre en la cabeza?
La mayoría de las veces sólo supone una migraña o cefaleas tensionales, que no deben preocupar al que las padece, pero se debe buscar la ayuda de un especialista para descartar cualquier situación grave, además de poderlas tratar y aliviar.
¿Qué signos deben preocupar?
En general, los dolores de cabeza de inicio agudo, de carácter explosivo, intenso, aquellos que vayan empeorando con el tiempo y, sobre todo, si se acompañan de otros síntomas neurológicos, fiebre o pérdida de conocimiento.
¿Es habitual que los niños tengan cefaleas?
Es un problema bastante frecuente en la infancia. Las migrañas, que son las cefaleas más frecuentes a estas edades, de carácter hereditario y habitualmente desencadenadas por situaciones de ansiedad (tensiones familiares, disgustos con los amigos, problemas escolares...) suelen comenzar a edades tempranas. A los 7 años, el 40% de los niños ha sufrido alguna cefalea. Sin embargo, muchos de los niños migrañosos menores de 8 años suelen mejorar o no volver a presentar más episodios al llegar los 14 años.
¿Es necesario que se realice un escáner en toda persona con cefalea?
Esta prueba tiene sus indicaciones y muchas veces una descripción detallada del tipo de dolor obtiene más información para un diagnóstico y tratamiento correctos. La evaluación del médico es imprescindible, realizándose las pruebas oportunas en el momento en que sea necesario.
¿Es necesario “aguantarse” con el dolor de cabeza y “aprender a vivir con él”?
En la actualidad, se conocen mejor los mecanismos que producen cada tipo de cefalea y, por lo tanto, su tratamiento. Existen nuevos fármacos cada vez más eficaces, además de distintas técnicas de relajación y apoyo psicológico que pueden aliviar los dolores.
¿Puedo tomar cualquier analgésico que tenga en casa?
Cuando uno tiene una cefalea leve, o presenta episodios recurrentes que ya han sido evaluados por un médico, conoce su diagnóstico y sabe qué medicamento debe tomar, puede uno mismo decidir cuándo y cuál de los analgésicos habituales es mejor y tomarlo sin necesidad de acudir al médico ante cualquier dolor de cabeza.
Pero no siempre está indicado la toma de analgésicos para los dolores de cabeza y todo dolor de cabeza que interfiera con la vida del que los sufre, tanto por su intensidad como por su cronicidad, debe ser evaluado por un especialista para realizar un adecuado tratamiento que puede variar según el tipo de cefalea.
El uso indiscriminado de analgésicos y fármacos antimigrañosos puede llegar a empeorar las cefaleas, por lo que es importante tomarlos bajo control médico, siempre que se necesiten con elevada frecuencia (más de una o dos veces a la semana, por ejemplo).
¿Qué importancia tienen los factores psicológicos en las cefaleas?
Los factores psicológicos tienen un papel importante, tanto en las migrañas como en las cefaleas tensionales. El dolor y, fundamentalmente, el dolor crónico, tiene un componente anímico importante.
El estrés puede actuar desencadenando, manteniendo o aumentando las crisis migrañosas en personas predispuestas biológicamente. Es importante conocer que un hecho puede ser estresante para determinadas personas, mientras que para otras no.
Lo que determina que sea estresante está en función de cómo se interpreta ese hecho y se reaccione ante él. Así, el migrañoso no estaría sometido a situaciones más estresantes, sino que le fallarían los mecanismos adaptativos ante estas situaciones.
El migrañoso suele ser una persona obsesiva, estricta, ordenada, trabajadora, preocupada por el éxito y con un gran sentimiento del deber. Por ello, muchos tratamientos van dirigidos a enseñar a reconocer las situaciones de la vida que le producen ansiedad y ayudarle a enfrentarse a ellas, ya que se sabe que el estrés produce cambios en la secreción de adrenalina, lo que desencadenaría cambios en las arterias cerebrales responsables del dolor.
¿La cefalea es un síntoma de trastornos psicológicos?
Asimismo, la cefalea puede ser un síntoma de distintas enfermedades psiquiátricas. La depresión se manifiesta en muchas ocasiones como cefalea, hasta un 50% de los pacientes que consultan por depresión presenta cefalea; esto no es de extrañar, ya que cefalea y depresión comparten mecanismos bioquímicos y los fármacos antidepresivos se utilizan para el tratamiento de ambos procesos.
El componente psicológico también tiene gran importancia en la génesis de las cefaleas tensionales. Las situaciones de ansiedad y tensión afectiva mantenida provocan una contractura de la musculatura cervical y craneal sostenida, contribuyendo al desarrollo de la cefalea por compresión de los nervios del cuero cabelludo.
Es en este tipo de cefaleas, cuando se demuestra actividad de contractura muscular, donde las técnicas de relajación y de biofeedback tienen mayor utilidad.
Teorías sobre los diferentes mecanismos causantes de la migraña
A pesar de los avances que se han producido en los últimos años en torno a los mecanismos que las producen, aún quedan muchos puntos por aclarar.
Se acepta que en la migraña existe un trastorno hereditario de los mecanismos que controlan el dolor y la regulación del calibre arterial, por lo que el cerebro de los migrañosos sería más fácilmente excitable por estímulos, tanto internos como externos, no siempre bien identificados.
Los dolores de cabeza serían la consecuencia de la interacción entre una vulnerabilidad genética y el entorno.
Para que se produzca la migraña intervienen las propias neuronas, los vasos sanguíneos y diversos mediadores químicos, y existen distintas teorías según se dé mayor importancia a unos factores o a otros.
Teoría vascular
Hasta los años 80 ha estado vigente la teoría vascular que sostenía que, inicialmente, tras una vasoconstricción (reducción del calibre) de las arterias intracraneales, se produce una disminución del riego sanguíneo cerebral, dando lugar a los síntomas del aura que anuncian la jaqueca. Posteriormente, ocurre una intensa vasodilatación responsable del dolor.
Estos cambios en los vasos ocurrirían en un territorio arterial especialmente sensible a ciertos estímulos: psicológicos, dietéticos, hormonales, entre otros.
Teoría neuronal
Esta teoría propone que los mecanismos causantes de las migrañas se generan en las neuronas. Por existir un predominio de la acción de las sustancias excitadoras del cerebro sobre las inhibidoras, las neuronas adquieren un elevado grado de excitabilidad que aumenta sus respuestas a ciertos estímulos (psicológicos, sensoriales, hormonales), activándose de este modo o, incluso, espontáneamente, los sistemas neuronales que transmiten el dolor.
Teoría neurovascular
Actualmente, se tiende a unificar estas dos teorías y se piensa que la migraña es el resultado de una interacción compleja entre la circulación intracraneal y la función neuronal. Las fibras nerviosas que están alrededor de las arterias intracraneales recogen los estímulos sensitivos y dolorosos de estos vasos y transmiten esta información a través del nervio trigémino a los sistemas cerebrales (tálamo y corteza cerebral), donde el dolor se hace consciente.
La serotonina tiene un papel importante en la producción de la migraña. La serotonina es un neurotransmisor, sustancia química usada por los nervios para su comunicación. Cuando los nervios son estimulados, es secretada por las terminaciones nerviosas y se dirige hacia unas dianas específicas, los receptores de serotonina.
La unión de la serotonina con el receptor es como la llave que abre una cerradura, desencadenando una respuesta específica. Tiene un papel importante en la regulación del calibre de los vasos cerebrales, produciendo, en la mayoría de ellos, una vasoconstricción.
La migraña sería la consecuencia de cambios en los niveles de serotonina, por lo que el cerebro perdería su habilidad para regular el calibre de los vasos. Durante el episodio de migraña, la serotonina está disminuida. Los vasos se dilatan y el componente líquido de la sangre es capaz de salir a los tejidos de alrededor. El organismo responde liberando sustancias químicas que causan una inflamación y hace que los vasos de esta zona se vuelven más irritables.
Cuando la sangre pasa por estos vasos más sensibles, con cada latido cardíaco, los vasos se dilatan, activando los nervios que llevan la información dolorosa al cerebro (trigémino), por lo que la persona siente el típico dolor pulsátil de las migrañas.
Basándose en todos estos mecanismos bioquímicos que intervienen en las migrañas, se están ideando vías de actuación terapéutica con fármacos que activan selectivamente ciertos receptores. Así, un fármaco activo para el dolor agudo de la migraña sería aquel que activase los receptores de serotonina porque produciría una vasoconstricción, disminuyendo la excesiva dilatación de los vasos y la inflamación dolorosa.
Existen en el cerebro áreas que ayudan al cuerpo a mantener un equilibrio bioquímico ante ciertos cambios en el ambiente, como cambios en el tiempo, cambios en el carácter, cambios hormonales, sustancias de la dieta...
En el cerebro de los migrañosos hay una alteración de algunos de estos mecanismos, por lo que estos cambios disparan el proceso que lleva a la producción de las migrañas. Por ello es importante conocer qué factores influyen en cada persona en el desencadenamiento del episodio y tratar de corregirlos.
¿Qué ocasiona las cefaleas tensionales?
Las cefaleas tensionales se piensa que son debidas a la contracción excesiva de los músculos del cuello y los hombros que se produce en situaciones de estrés, llevando esto a la irritación de los nervios que se encuentran englobados en esos músculos.
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Autor(es): Luis Maita, Obra: Dolor de cabeza, Publicación: , Última actualización: , Lugar de publicación: Madrid, URL: https://www.discapnet.es/salud/sintomas/dolor-de-cabeza
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