Las placas en la garganta son un signo común de las anginas o amigdalitis, una infección de las amígdalas que puede ser causada por un virus o una bacteria.
Estas pueden provocar dolor al tragar y dificultar la ingesta de alimentos y líquidos. En algunos casos, pueden presentarse placas en la garganta sin fiebre, lo que no descarta una infección. A continuación, explicamos sus causas, síntomas y tratamientos.

¿Qué son las placas en la garganta?
Las placas en la garganta, están caracterizadas por la inflamación de las amígdalas, pueden ser desencadenadas tanto por infecciones víricas como bacterianas. Aunque en el pasado se pensaba comúnmente que las placas indicaban un origen bacteriano, recientes investigaciones han revelado que también pueden ser resultado de infecciones víricas.
La señal más evidente de placas en la garganta suele ser el dolor al tragar, que puede agravarse al consumir alimentos o líquidos. A menudo, la fiebre se presenta como un acompañante no deseado.
Sin embargo, es importante destacar que las placas en la garganta no deben confundirse con los puntitos blancos que pueden surgir en la cavidad bucal debido a la falta de higiene, ya que su causa radica en un proceso infeccioso.
Causas de las placas en la garganta
Las amígdalas, dos pequeñas masas de tejido linfático ubicadas en la parte posterior de la garganta, forman parte del sistema inmunitario y actúan como una barrera de defensa contra virus, bacterias y hongos que ingresan por la nariz o la boca. Por esta razón, las infecciones en esta zona pueden causar amigdalitis y, en consecuencia, la aparición de placas en la garganta.
La amigdalitis es más frecuente en niños, ya que la función inmunitaria de las amígdalas disminuye después de la pubertad, lo que reduce la incidencia en adultos. Además, la mayor exposición a contagios en entornos escolares favorece la propagación de infecciones en la infancia.
La inflamación de las amígdalas puede tener origen viral o bacteriano. Diferencias entre amigdalitis viral y bacteriana deben considerarse, ya que el tratamiento varía según la causa.
- Amigdalitis viral: Los virus son la causa más común de la amigdalitis. Patógenos como los del resfriado o la gripe suelen estar involucrados, aunque también pueden provocarla otros virus, como el Epstein-Barr (mononucleosis), el herpes o el VIH.
- Amigdalitis bacteriana: En estos casos, la infección se debe a bacterias, siendo el estreptococo del grupo A la más frecuente. Cuando esto ocurre, se habla de amigdalitis estreptocócica. Otras bacterias también pueden desencadenar la formación de placas en la garganta.
¿Se contagian las placas en la garganta?
Es fundamental aclarar que ni la amigdalitis ni las placas en la garganta son contagiosas en sí mismas. Lo que realmente se propaga son los virus y bacterias que las causan.
Por lo tanto, mantener una higiene adecuada, incluyendo el lavado de manos y el uso de mascarillas en entornos propensos a la transmisión, es importante para evitar la propagación de estos gérmenes, que a menudo se transmiten a través de estornudos y tos de personas infectadas.
Síntomas de las placas en la garganta
La amigdalitis presenta una serie de síntomas característicos:
- Amígdalas enrojecidas e inflamadas.
- Dolor de garganta intenso y dificultad de tragar.
- Presencia de parches blancos o amarillos en la garganta, siendo esta la señal más evidente de placas en la garganta.
- Ganglios inflamados, que pueden causar molestias al tacto.
- Ronquera debido a la inflamación de las amígdalas.
- Mal aliento.
- Dolor de cabeza y rigidez en la nuca.
- Fiebre.
- Pérdida de apetito debido al dolor al tragar saliva.
Cuando la amigdalitis tiene un origen bacteriano, los síntomas tienden a ser más intensos, incluyendo la formación de placas en la garganta.
Tratamiento de las placas en la garganta
Cuando las placas en la garganta son de origen viral, generalmente relacionadas con resfriados o gripes, el tratamiento suele centrarse en el alivio de los síntomas. Se trata con:
- Analgésicos y antitérmicos (paracetamol o ibuprofeno).
- Hidratación abundante.
- Reposo.
- Gárgaras con agua tibia y sal.
- Consumo de líquidos templados o fríos para aliviar la irritación.
Sin embargo, en casos donde el origen es bacteriano, es esencial el uso de antibióticos específicos para tratar la infección.
- Se tratan con antibóticos prescritos por un médico.
- Se recomienda completar el tratamiento para evitar recaídas o complicaciones.
Sin embargo, el médico evaluará cuidadosamente si es necesario, ya que no todas las infecciones de garganta requieren tratamiento con antibióticos.
Enjuagues antisépticos
La investigación ha demostrado que los enjuagues antisépticos formulados con cloruro de cetilpiridinio pueden desinfectar la zona afectada, ayudando a prevenir la colonización de gérmenes en las amígdalas. Esta medida puede ser útil en el tratamiento y la prevención de placas en la garganta.
¿Cuándo hay que acudir al médico?
Es necesario estar atento a los síntomas y buscar atención médica adecuada cuando sea necesario. Si experimentas dificultad para tragar, dolor de garganta intenso, fiebre y no hay mejoría después de 48 horas, es importante consultar a un médico.
Las anginas pueden tener un impacto significativo en la calidad del sueño, pueden dar lugar a apneas o incluso causar abscesos de pus detrás de las amígdalas.
En casos de amigdalitis bacteriana, si no se sigue el tratamiento antibiótico adecuado, existe un riesgo, aunque reducido, de complicaciones a nivel renal, articular, cardiaco, nervioso y dérmico.
Si el médico lo considera necesario, pueden realizarse análisis de sangre o tomar una muestra de exudado de la amígdala para identificar la bacteria causante.
¿Cuánto duran las placas en la garganta?
Las placas en la garganta pueden ser dolorosas, pero en casos de amigdalitis vírica, suelen resolverse en pocos días, el tiempo que el sistema inmunitario necesita para combatir el virus.
Sin embargo, cuando la amigdalitis es de origen bacteriano, los síntomas tienden a ser más intensos, y el tratamiento antibiótico puede ser necesario para aliviar las molestias.
Consejos y remedios caseros para reducir las placas en la garganta
Existen medidas que puedes tomar para aliviar el malestar causado por las placas en la garganta:
- Consumir alimentos templados y triturados para facilitar la deglución y minimizar el dolor al tragar.
- Mantenerse bien hidratado bebiendo agua, caldos o infusiones para evitar que la garganta se reseque, ya que la sequedad puede aumentar el dolor.
- Los helados y los polos de hielo pueden ayudar a reducir la inflamación de la garganta.
- Colocar humidificadores en casa para evitar la sequedad ambiental.
- Disfrutar de una ducha larga o un baño caliente para hidratar la garganta.
Cuidar la higiene y fortalecer el sistema inmunológico ayuda a prevenir la aparición de placas en la garganta. Ante cualquier duda, consulta con un médico para recibir el tratamiento adecuado.
Sidell D, Shapiro NL, 2021, Acute tonsillitis, Infect Disord Drug Targets., 10.2174/187152612801319230, https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/22338587/
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Autor(es): Luis Maita, Obra: Placas en la garganta: Síntomas y como tratarlas, Publicación: , Última actualización: , Lugar de publicación: Madrid, URL: https://www.discapnet.es/salud/sintomas/placas-en-la-garganta
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