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Entrevista: Ana Alemany

¡¡Hay tantas vidas tan interesantes por el mundo…!!

"Si se quiere, con tesón, fuerza y energía, se puede"

M.V.B.G. / septiembre 2021 para Discapnet

Ana Alemany nació en Pego (Alicante), estudió la carrera de Derecho en la Universidad de Valencia, completando sus estudios con un MBA (Master en Administración de Empresas) en la Escuela de Negocios de Madrid.

La escritora Ana Alemany

En el año 2015 coordinó la publicación del libro "Todos los caminos llevan a India", eso la motivó para seguir publicando libros sobre mujeres.

En mi opinión los libros de Ana, creo que nos hacen reflexionar sobre lo qué de verdad importa en esta vida. Tener coraje para hacer las cosas y llevar a cabo nuestras ilusiones.

En estos libros Ana nos ha mostrado algunos ejemplos de mujeres fantásticas, qué con su fuerza interior no han dejado de luchar ni un solo día por seguir con sus propósitos de vida y alcanzar esos objetivos que les hacen sentirse vivas y ser felices, cada una de ellas tiene su propia historia y son dignas de ser contadas, para eso hemos contactado con esta escritora que nos ha enseñado que, si se quiere, con tesón, fuerza y energía, se puede.

Estas historias, son solo una muestra de qué se puede conseguir lo que se desea, hay muchas mujeres que podrían llenar páginas y páginas de libros, Ana ha querido dar en sus libros visibilidad a algunas de ellas, no están todas en esas páginas, pero sí están en cada esencia de mujer que cuenta en ellas.

Entrevista

¿Cómo surgió la idea de escribir libros sobre mujeres y que en ellos contaras sus experiencias tanto en el mundo laboral como personal?

Pues María… te voy a ser sincera… pero el primer libro me lo encargaron. Coordiné un libro de esas características y, como lo debí hacer más o menos bien, me pidieron que escribiera uno sobre mujeres que, de algún modo, tuvieran alguna relación con los polos. ¡Glup! ¡Sentí pavor! Pero… en cuanto me puse a ello, sentí una satisfacción inmensa al ver que, contra lo que hubiera podido pensar… ¡podía con ello! Eso te hace sentir indescriptiblemente bien. Al ser un trabajo de encargo, es una pena, pero no tengo los derechos de autor sobre este libro. Los tiene la editorial, y eso, la verdad, te deja con un poquito de “¿tristeza?”. No pasa nada. Los siguientes libros ya si son míos. Y, sentir que los has creado tú y que, además, son tuyos… la verdad es que mola que no veas… jajaja

¿Cómo ha sido el trabajo de tus libros dedicados a mujeres relacionadas con diferentes campos? ¿Cómo fue el proceso?

Cuando ves una película que dura alrededor de 100 minutos, mientras disfrutas siguiendo la trama, no te puedes imaginar el trabajazo que hay detrás… ¿verdad? Bueno, pues… salvando las distancias, esto es algo similar.

Realizar un listado con las posibles protagonistas puede que sea la fase más compleja. A quien eliges y, por el contrario, a quien dejas fuera. Ardua tarea. Pero después, intentar localizarlas es también dificilísimo. Cuando te dan el visto bueno, y llegas a la fase de pensar que información solicitar… ufff.

La parte que más me gusta es la de redactarla. Creo que cuando escribes… una magia se apodera de ti, y te ayuda. Te va indicando el camino hacia el que te tienes que dirigir. Déjame que te cuente un secreto que a nadie le gusta reconocer: Lo más fácil del mundo es sentir un bloqueo. Y borrar lo que escribes una y otra vez. Eso, a veces, te hace incluso dudar de ti misma. La naturaleza humana es la mar de débil, ¿verdad? Pero… y eso es lo bonito, hay otras veces que, literalmente, siento que las palabras salen solas de mi ordenador. Cuando releo un párrafo… a veces me digo… “¿esto lo he escrito yo?”

¡Me encanta escribir! Me paso el día pensando cosas, imaginando historias mientras voy por la calle, en la cola del supermercado o en el metro. Miro el rostro de una persona y creo adivinar qué caminos ha tomado para llegar a donde está. Y lo mejor de todo es que, como son gente anónima, nunca sabré si he acertado o no. Así, la magia y el suspense duran para siempre. Es importantísimo no perder la magia = inocencia nunca. Más de lo que nos imaginamos.

Durante ese tiempo, me imagino que te habrás lanzado a experimentar algunas de las actividades que esas mujeres realizan ¿es así? ¿podrías contar alguna de tus experiencias?

Jajajaja… pues la verdad es que sí. He subido en globo y me alucinó. Es una sensación extrañísima (pero no entendáis extraña como desagradable… noooo). Te das cuenta que vuelas, porque las cosas se hacen más pequeñas, pero tú no sientes nada. Únicamente una paz maravillosa. Alcancé creo que 40 km/hora, y ni siquiera se me movía el pelo… ya que vas “dentro del viento”, a velocidad cero. La verdad… me sentí… ¿cómo decirte?... ¿poderosa?... me sentí cerquita de Dios, pero no en un sentido religioso (aunque también), sino… más bien… más grande de lo habitual. Los problemas se quedaron abajo y yo, allí arriba, tan solo viví.

Otra cosa fue el aterrizaje. “Aporrizaje” lo llaman en términos de aerostación… ¡¡no digo más!!

También he hecho un bautizo en el mundo del buceo. Fíjate qué cosas… me recordó a volar en globo. Tampoco había problemas allí abajo. Ni ruido. Solo paz. Y mucha vida. Vi una barracuda, un banco de lisas, peces de colores, medusas, corales, algas… qué cosas… porque la vida continuaba, aunque hubiera 7 metros de agua salada por encima. A los 3 días quise repetir con uno de mis hijos, pero las condiciones del mar no fueron las idóneas… así que, lo dejamos para otra ocasión. Nos costó mucho tomar esa decisión, pero es que con el mar (ni con el aire) se juega. Hay que ser responsable.

Y en un futuro casi casi inmediato… voy a saltar en tándem. Jaja… creo que me he vuelto un poco loca, ¿no crees?

Son efectos colaterales de haber descubierto el mundo maravilloso que me han abierto las protagonistas de mis libros.

Cuéntanos qué te han aportado estos libros donde varias mujeres cuentan su afición en la vida, su pasión, su vivir el día a día

¿Tú que crees? Te acabo de contar que he subido en globo, he buceado y voy a saltar en paracaídas… Creo que me han despertado las ganas de vivir. No es que antes no disfrutara de la vida. No, no es eso. Pero puede que, COMO NO TENÍA NINGÚN REFERENTE CERCANO (im-por-tan-ti-si-mo lo de los referentes), no me había planteado nada de eso. Ardo en deseos, por ejemplo, de ir a la Antártida. Wow. Debe ser… pero soy consciente de que mi presencia en el continente helado iba a ser gratuita e iba a dejar (aunque hiciera todo lo posible por no dejarlo) una huella de carbono grande e inútil. No soy científica, ni bióloga, ni tan siquiera, una simple aventurera. Sería, más bien un capricho. Y creo que la naturaleza no está ahora mismo para caprichos.

Creo que es muy importante disfrutar con lo que haces. Sea lo que sea. Mi padre murió tras una enfermedad rara degenerativa larga y tortuosa como suelen ser este tipo de enfermedades. Vivía lejos de donde yo resido, así que, cuando iba a pasar el fin de semana con mis padres, les leía lo que iba descubriendo, les hablaba de las protagonistas que había conseguido contactar y entrevistar. Ellos se acostaban muy pronto y yo, entonces, aprovechaba para escribir. Al día siguiente, con una ilusión casi casi infantil (… a pesar de mi edad, jajaja) les preguntaba… “¿queréis que os lea lo que escribí ayer?”. Mi padre murió antes de que mi primer libro viera la luz… y por eso, se lo dediqué. ¡No podía ser de otro modo!

Hay una historia en el libro de los Aires que, de verdad, se debería estudiar en los colegios. Una historia de superación como no he conocido otra igual. La de Elisabeth, que sufrió un accidente con un planeador y quedó parapléjica… pero a los 3 meses ya estaba de nuevo subida a un avión, practicando el vuelo sin motor. ¿Quién dijo miedo? La vida es demasiado hermosa para perder el tiempo con lamentaciones. Lo hecho… hecho está. Ahora… a mirar hacia adelante. ¡Siempre hacia adelante!

He leído dos de tus libros y me falta "Todos los caminos llevan a los polos" y que leeré pronto, estas mujeres se las podría definir como valientes, con mucha fuerza interior por lo que hacen ¿alguna otra cualidad a destacar?

Valientes… pero también, constantes, trabajadoras, persistentes, inquietas, curiosas, motivadas y, a su vez, motivadoras, que supieron aprovechar una oportunidad que, a su vez, se trabajaron para conseguirla, generosas, atrevidas, solidarias… porque… ¿hay algo más solidario que abrir una nueva cara en el macizo Vinson, en la Antártida, como hizo Chus Lago? ¿o pelear hasta llegar al Tribunal Supremo para que se reconozca el derecho a la baja por maternidad para las mujeres piloto como Consuelo Arto? ¿O sumergirse entre los amasijos de hierro de una plataforma petrolífera para estudiar y analizar si se puede convertir en un arrecife artificial, como hacen Emily y Amber?

Pufff…

Y voy a dejar fuera los adjetivos como increíbles o impresionantes… ¡porque si no, no acabaremos nunca!

Todas las historias de tus libros son increíbles, sé que te será difícil, pero ¿destacarías alguna en particular?

Esa es una pregunta… difícil y un poco ingrata que me hacen mucho… porque, cuando nombras a una… parece que las demás dejen de existir. ¡Para nada! Peeeeero… si insistes… jaja... te diré que la paleoclimatóloga Carlota Escutia me tiene loca… porque pensar que gracias a esa ciencia sabemos que hace 50 millones de años (que se dice pronto) no había hielo en el planeta, y que en los polos había una temperatura tropical de unos 25 grados centígrados, puesss… ¡qué quieres que te diga!

Pero, también destacaría la historia de la cometera Nati, o de Rocío, piloto de caza F18, o Jennifer, que cruzó nadando el océano Atlántico, o la de Jerri Nielsen, que estando incomunicada en la base de Admunsen-Scott en la Antártida se detectó un tumor maligno en el pecho y … SE OPERÓ ELLA MISMA…

En fin… ¿ves?... me pongo a hablar y no puedo parar.

¡Me siento tan afortunada de haber podido conocer las historias de estas mujeres!¡ Y… cuando pienso que a muchas de ellas las he conocido en persona…! Es que no me lo creo…

Los valores de estas mujeres son dignos de dar conocer a través de los ojos de la juventud ¿has impartido charlas en algún centro educativo? ¿Crees que esto podría ayudar a visibilizar un poco más la igualdad de género y la conciliación familiar?

Tenía muchas charlas concertadas en colegios, en centros de buceo, en museos marinos… pero “doña pandemia” lo fastidió todo. Todas las charlas o entrevistas que he realizado han sido vía on line. Están bien… pero no es lo mismo.

Hubo un cole que me contactó. Una profe de primaria de ciencias leyó un post mío de Instagram sobre un lago de la Antártida, el lugar más salado del planeta, que sigue sin helarse a -50º y me pidió si les podía hablar sobre ello. Muy complicado tengo que tener mi calendario para que yo diga que no a algo. Así que escribí un texto, adaptado a la edad de los “espectadores”, y se lo envié a la profe para que le diera el visto bueno. Cuando hablé con la clase, les nombré, muy despacito, la palabra PA-LEO-CLI-MA-TO-LO-GA… que, a su vez, la profe había escrito en la pizarra. Y, entre el murmullo constante que había entre los alumnos, escuché la voz de uno de ellos, que le decía al del pupitre de al lado… “pero… ¿una palabra puede tener tantas letras?”. ¡Casi me como! ¡Me encantó!

Y, respecto a tu pregunta sobre visibilizar la igualdad de género… ¡por supuesto! Creo que es fundamental que todos sepamos que hay personas que pueden alcanzar la excelencia, por ejemplo, en el estudio sobre las medusas. Y esa persona, además, tenga hijos y una familia. Y, encima, sea mujer. Pero siempre, y esto lo repito hasta la saciedad, siempre desde un punto de vista inclusivo.

En el libro MUJERES DE LOS AIRES, también incluyo a David Abad, al que agradezco su generosidad por querer participar en un libro sobre mujeres. ¡Fue un detalle maravilloso!

¿Tienes algún proyecto en mente?

Siiii… tengo un montón de proyectos… algunos chiquititos, otros no tantos. Algunos “secretos” (jeje… no puedo hablar de ellos por motivo de privacidad), pero otros están a la orden del día. Por ejemplo, mis colaboraciones en la Fundación Aquae y mis publicaciones en El Ágora, el Diario del Agua, un periódico digital donde me han “bautizado” como la reportera marina. ¡Me encanta!

Os dejo algunos enlaces para que, si alguien quiere, pueda echar un vistazo.

También he de contarte, María, que hay varios proyectos que, a pesar de haber invertido mucho tiempo en ellos, no han salido. Es importante hablar también de estas cosas. No son fracasos. Simplemente, no han podido ver la luz. Comencé un libro de mujeres de la Tierra, y tras haber hecho muchas entrevistas y tener varios capítulos terminados, lo tuve que dejar. Por falta de patrocinio. Acababa de estallar una pandemia y vi muy difícil continuar con ello. Pero me gusta ver el lado positivo de las cosas… porque todo SIEMPRE SIEMPRE SIEEEEMPRE tiene un lado positivo… y es que conocí la vida de unas mujeres súper interesantes. No sé si tú conoces a muchas paisajistas, apicultoras o pastoras… yo sí. Y disfruté muchísimo al escuchar todo lo que tuvieron a bien contarme. ¡¡Hay tantas vidas tan interesantes por el mundo…!!

Para terminar, aparte de escribir y leer ¿tienes otras aficiones?

Pues mira… el otro día le contaba a mi hijo mayor (tengo 3, varones… calla, calla… tanto hombre en casa) … ¿sabes, Diego?... es algo que hoy en día parece que está feo decirlo, pero… ¡me encanta ser ama de casa! Jajaja. Sí. Disfruto organizando, ordenando, cocinando. Pero claro… es cierto que no soy ama de casa a “full time”, porque escribir me consume mucho tiempo.¡¡ Muchísimo!! Me siento a escribir de día y… cuando me quiero dar cuenta… ¡es de noche!... jaja

Me encanta el mar. Oír su sonido (que es distinto en cada lugar), su olor, su sabor.

Me encanta pasear. Pasear…, no caminar rápido para mantenerme en forma, ¿eh? Siempre que puedo paseo por El Retiro, en Madrid, porque vivo cerca. Y disfruto admirando los árboles, sus sombras, las formas que tienen algunos. La gente. Los pájaros. ¿Te has fijado en la gama de verdes

que puede haber en un mismo árbol?¡ Y en un parque ya… ni te cuento! La vida es maravillosa, María, aunque a veces, nosotros, simples mortales, no lleguemos a comprenderla y nos duela.

Muchas gracias Ana por darnos un poco de tu tiempo y que dejaras que te conociéramos un poco más, ha sido un placer entrevistarte y seguiremos tus pasos, también tu eres un referente de mujer.

Si quieres conocer más a Ana, puedes seguirla a través de Instagram @ana68alemany

Libros publicados

Historias de mujeres extraordinarias en diferentes campos de actuación pero que todas ellas tienen o tuvieron un objetivo común, por eso lucharon por conseguir sus sueños (pilotos de aviones, de helicópteros, militares, arqueólogas, científicas, deportistas, pescadoras entre otras). Cada libro está ilustrado con fotografías a color de sus protagonistas.

Mujeres de los aires (2021)
Portada del libro Mujeres de los aires (2021)En 1910, la francesa Raymonde de Laroche fue la primera mujer en conseguir la licencia de piloto. Harriet Quimby fue, en 1911, la primera estadounidense en sobrevolar el Canal de la Mancha. En España, la primera piloto fue, en 1931, Mari Pepa Colomer, que daría instrucción durante la República. Amelia Earhart culminó un vuelo desde Terranova hasta Irlanda del Norte que le supuso reconocimiento mundial y ha sido inspiradora para miles de personas. Ellas son las pioneras. En esta obra están las españolas de ahora mismo. Se puede comprar en Ediciones del Viento. En cualquier librería o gran superficie como La Casa del Libro o en el FNAC. Y en Amazon.

Mujeres de los mares (2019)
Portada del libro Mujeres de los mares (2019)El mar es el inicio de la vida y el futuro del planeta y a pesar de los daños que el ser humano viene causando a los océanos, este libro es un canto de optimismo. Una compilación de semblanzas de un grupo de mujeres que han hecho del mar su razón de vivir. Deportistas, científicas, artistas, aventureras, que con su esfuerzo y entusiasmo han alcanzado la excelencia en sus distintas actividades, y que nos hacen creer que hay esperanza. Se puede comprar en Ediciones del Viento. En librerías y grandes superficies, también a través de Amazon.

Todos los caminos llevan a los Polos.
Portada del libro Todos los caminos llevan a los Polos. 20 historias de mujeres en las regiones frías, (2019)20 historias de mujeres en las regiones frías, (2019)
¿Qué puede mover a una mujer a dejar su hogar, su ciudad, su familia y amigos y adentrarse en un mundo tan inhóspito como es la Antártida? ¿Qué fascinación causa el Ártico cuando muchas mujeres se ponen como reto alcanzarlo? ¿Qué lleva a una española a cruzar andando el Polo Sur en solitario?
Ellas nos lo cuentan a través de las páginas de este libro. Se puede comprar en Ediciones Casiopea.

Publicaciones de Ana Alemany

Otras entrevistas 

MUJERES DE LOS AIRES

MUJERES DE LOS MARES

  • Autor(es): , Obra: Ana Alemany, Publicación: , Última actualización: , Lugar de publicación: Madrid, URL: https://www.discapnet.es/mujer/entrevistas/ana-alemany

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